Preparar una comida en casa e invitar a amigos o familiares para disfrutar juntos es un plan que a muchos nos encanta. Sin embargo, cualquier encuentro gastronómico puede elevarse con una raclette grill, que permite a cada persona elegir y preparar sus propios alimentos.
Una raclette es un electrodoméstico práctico que cuenta con una superficie de grill o piedra en la parte superior, la cual se calienta gradualmente para cocinar diversos alimentos. En la zona inferior, se derrite y gratina el queso, listo para acompañar los platos que cada uno elige.
Ahora bien, ¿cómo elegir la raclette para queso ideal? ¿Qué aspectos debemos considerar? ¿Qué tipos de modelos existen? A continuación, responderemos estas y otras preguntas clave.
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Esta raclette ofrece una experiencia única y divertida para derretir queso. Con 600W de potencia, su superficie superior permite cocinar carnes y verduras rápidamente, mientras que la zona inferior dirige el calor para gratinar y fundir el queso a la perfección.
Guía de compra: ¿Qué raclette grill elegir?
Características clave a considerar
Tamaño: Las raclettes son ideales para disfrutar de una comida compartida en casa. Antes de escoger un modelo, es fundamental decidir para cuántas personas lo necesitas. Los modelos estándar suelen estar diseñados para 4-6 personas, pero si planeas ser anfitrión con frecuencia, considera uno de 8 personas, como los que mencionamos anteriormente.
Además, ten en cuenta el espacio que ocupará la raclette, tanto al usarla como al almacenarla. De nada sirve un modelo grande si luego no tienes dónde guardarlo o colocarlo. Las raclettes circulares suelen medir alrededor de 45 cm de diámetro, mientras que las rectangulares rondan los 45×30 cm.
Potencia: La potencia influye directamente en la rapidez de calentamiento y en la capacidad de la raclette para cocinar los alimentos. Cuanto mayor sea la potencia, más rápido alcanzará la temperatura ideal. Las raclettes con grill metálico calientan más rápido que las de piedra, aunque estas últimas destacan en retención de calor y propiedades antiadherentes.
Recuerda que, a mayor potencia, mayor consumo energético, lo cual impactará en tu factura de electricidad.
Funcionalidad y accesorios: La mayoría de las raclettes incluyen planchas para cocinar y sartenes pequeños para fundir queso. Sin embargo, una característica que marca la diferencia es un termostato regulable, ya sea con perilla o botones, que permite controlar la temperatura para un mejor resultado en los alimentos.
Otros accesorios útiles incluyen paletas de madera y tenedores para fondue, que facilitan el uso en la mesa y protegen las superficies antiadherentes de los sartenes.
Estilo: Las raclettes tradicionales cuentan con una placa superior para asar y una zona inferior con sartenes pequeños para gratinar queso. En el mercado encontrarás opciones para uso doméstico, así como modelos de alta gama, ideales para restaurantes, aunque con un costo superior.
Recientemente, han surgido diseños innovadores más compactos y verticales, que ahorran espacio y consumen menos energía, aunque tienen menor capacidad y tamaño.
Mantenimiento: El mantenimiento de la raclette debe ser sencillo. Las planchas de acero laminado con tratamiento antiadherente son ideales, ya que son fáciles de limpiar y, en muchos casos, aptas para lavavajillas. En cuanto a las planchas de piedra, es recomendable que sean desmontables y lisas, ya que la porosidad puede facilitar su deterioro si se expone a la humedad.
Independientemente del modelo, asegúrate de lavar todos los accesorios después de cada uso y secarlos completamente antes de guardarlos.